El presidente de la Interprofesional, Francisco Góngora, ha participado en las Jornadas ‘Avances y retrocesos en Control Biológico’ organizada por Cajamar y Coexphal
La Interprofesional Española de Frutas y Hortalizas, HORTIESPAÑA, de la mano de su presidente Francisco Góngora ha participado esta mañana en la jornada técnica ‘Avances y retrocesos en Control Biológico’ organizada por Cajamar y Coexphal. Ante un aforo de más de 100 técnicos de campo, Góngora ha trasladado los objetivos de la campaña de promoción e información ‘Cultivos de Invernadero’ y ha destacado que no es una acción orientada a vender más, sino a vender mejor nuestros productos y demostrar al mundo lo que estamos haciendo”.
Francisco Góngora ha explicado el desarrollo de esta acción a nivel local bajo el eslogan ‘Lo estamos haciendo bien’. Además, se han proyectado los dos videos promocionales y divulgativos, el primero referente a la percepción que se tiene sobre los cultivos bajo cubierta y el segundo, ‘Un mar de razones’ en el que se dan todos los argumentos positivos sobre los que se construye este sistema productivo.
Para el presidente de HORTIESPAÑA es fundamental la implicación de todos los agentes del sector, y en este caso, especialmente los técnicos de campo ya que ellos “son grandes conocedores de todos los aspectos productivos de la horticultura bajo invernadero y gracias a ellos y a su labor de asesoramiento, se han conseguido grandes avances, entre los que destaca la implantación del control biológico de plagas”.
El sector hortofrutícola bajo invernadero cumple una década desde la llamada ‘Revolución Verde’. Los cultivos bajo invernadero del Sureste español se caracterizan por ser innovadores y por su alta rentabilidad, pero también por haber sabido superar los retos que han ido apareciendo en cada momento. En el caso de la utilización de fitosanitarios para el control de plagas y enfermedades, el sector supo ser pionero en la puesta en marcha y gestión de programas de control integrado de plagas (CIP). Este proceso ha convertido a los cultivos de invernadero del Sureste español en un referente a nivel mundial de la aplicación exitosa de las estrategias de Control Biológico de Plagas.
Ventajas del control biológico de plagas
La ventaja más importante del control biológico es que permite mantener los cultivos a salvo de las plagas con una reducción drástica de productos fitosanitarios. De ese modo se consiguen cosechas con una mejora en la seguridad alimentaria y que pueden exportarse con los estándares de seguridad más exigentes.
Uno de los mayores problemas fitosanitarios en las zonas de alta concentración de invernaderos es que, por el solape de los cultivos, las plagas invaden cultivos cercanos masivamente cuando se eliminan las plantas de un invernadero. En fincas donde funciona el control biológico, este efecto no se produce. Gracias a la ausencia de fitosanitarios, la fauna auxiliar se reproduce en las plantas, y mantienen poblaciones altas hasta el final del cultivo.
El efecto más deseado de la implementación del control biológico ha sido una bajada espectacular de las sustancias activas presentes en los productos durante la última década que se aplica a este sistema de producción de frutas y hortalizas.
En definitiva, la aplicación del control biológico ha supuesto un gran paso adelante respecto a la sostenibilidad de los cultivos hortícolas protegidos, ya que consigue los objetivos deseados: garantía alimentaria de los productos hortofrutícolas obtenidos, alta eficacia de control de plagas y disminución en el uso de fitosanitarios.